Alameda Principal
Por Steve:
Os transcribo tal cual lo que anoté en la pequeña libreta que portaba encima en mi visita a Málaga, mientras me bebía una cerveza en un bar de una de las grandes avenidas de la ciudad.
Hemos aparcado cerca de La Rosaleda, que está 'a fer la mar' de aquí, o como dicen los malagueños, 'a una peshá de andar'. A base de preguntar por la feria de Málaga nos han hecho llegar hasta el centro histórico, y además haciéndonos evitar lo que parece ser un barrio conflictivo. La verdad es que siento curiosidad por saber qué cojones hay dentro de ese barrio para que la policía nos diga que ni se nos ocurra pasar por ahí. En la feria esta que nos decían esperaba encontrar malaqueñas salerosas bailando o montadas en caballos, pero en lugar de ello me he encontrado una barbaridad ingente de quinceañeras alcoholizadas con botellas de Cartojal en la mano y flores en la cabeza. Son las 6 de la tarde pero ya se ha acabado la fiesta y la gente se está empezando a ir. Así que nos hemos buscado un bar en el que descansar un poquito porque nos espera un pateo importante a la vuelta. Al lado nuestro ha aparcado en doble fila un carro de caballos, el jinete ha bajado para pedir aquí unos bocadillos y parece que no se va hasta que se los hagan. Qué huevos tiene y menudo tifostio está montando en medio de la avenida. Y digo yo, que si lo deja ahí y se va, ¿cómo se lleva la grua un carro de caballos?. Llevo desde que salí esquivando las Cruzcampo y el universo se lo cobra esta vez poniéndome una cerveza caliente.
Debo decir que no guardo un buen recuerdo de Málaga, lo cual no me parece justo. Qué remedio, tendré que volver.
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