UN SEGUIMIENTO DE LOS BARES A TRAVÉS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA Y EL RESTO MUNDO




miércoles, 13 de enero de 2010

Bar de nombre desconocido

Pje del Can Menor

AVENTURA CÁNTABRA - Día 1: El Viaje

Por Steve:


Algunas horas despues de que nos paráramos en un pueblo remoto de la Mancha para almorzar, nos detuvimos en Madrid para comer. Y no porque nos guste especialmente la capital si no porque teníamos que pasar por cojones y ya apretaba el hambre. Nos costó cosa de 20 maniobras encajar el coche en la única plaza de aparcamiento libre de "la gran ciudad", tan ajustado quedó en la plaza que pensamos que a la hora de sacarlo tendríamos que volcarlo y revolcarlo. Pero de eso ya nos encargaríamos más tarde, lo que tocaba ahora era buscar un bar en el que acompañar nuestro bocata casero con una cerveza y tampoco eso nos fue fácil. No sé en que zona de Madrid nos metimos pero tardamos eones en concluir nuestra búsqueda. Inimiaginable en cualquier otro punto de España. Indignado estoy aun.

Primero vimos una cervecería que tenía buena pinta aunque con precios que se pasaban 3 pueblos, asi que seguimos buscando y al cruzar la esquina había otro bar, más pequeño y modesto, en una calle tan insignificante que no sale en el StreetView de Google Maps (razón por la cual desconozco el nombre del lugar). Estaba regentado por unos chavales argentinos que dudaron si nos dejaban comer nuestros bocatas caseros en su local: 'Bueno, vale. Pero porque es navidad', dijeron. Nos pedimos 3 minijarras de cerveza a 2'20 cada una y allí nos comimos nuestros bocatas de mamá. Tim era el tercer bocadillo de fiambre que se comía a lo largo del día y para variar decidió darle la vuelta a este, con la corteza por dentro y la molla por fuera. Todos pensamos que iba a ser el invento del siglo pero no. Era exactamente lo mismo solo que con un tacto más suave y blandito.
Al terminar de comer, Spectrum se acercó a la barra con sus andares de tío duro.


- Os voy a pedir algo y os voy a ir diciendo cómo se hace porque aquí no sabréis lo que es. ¿Tenéis leche condensada?

- No, lo siento, no podemos hacerte un bombón.

- oh...vale, pues entonces ponedme un cortao.

Y el cortao le costó 1'50 al bueno de Spectrum (Por cerca de 2 euros le hubiera salido el bombón de haber leche condensada).


Concluiré diciendo lo que ya sabía antes iniciar nuestro viaje a Cantabria. Madrid es un asco. Y ¿Por qué esta antipatía irracional? He estado varias veces allí y nunca le he visto nada bueno ¿Habeis visto aquel capítulo de Los Simpsons en el que Homer odia Nueva York? Pues si no lo habeis visto vedlo, que lo mio es algo pareceido. Aunque reconozco que si este bar estuviera en Valencia con sus precios normales y tal, no me hubiera disgustado.
y aquí me despido, próxima parada, Burgos, eso si era una ciudad como Dios manda. Un abrazo para todos los madrileños, aunque vivan en una ciudad de mierda. ;)

No hay comentarios: